En la localidad de Cazadores Correntinos, se llevó a cabo una despedida cargada de emotividad en honor al Padre Ariel Giménez, quien durante su tiempo en la comunidad prestó un servicio más que importante.
La jornada comenzó con una solemne misa en la capilla del lugar, presidida por el propio Padre Ariel, quien visiblemente emocionado compartió sus experiencias y agradeció el apoyo recibido de toda la comunidad.
Durante la celebración religiosa, el Padre Giménez expresó su crecimiento y maduración personal durante su estancia en la ciudad, destacando que su próxima partida a la ciudad de Goya es una manifestación de la voluntad de Dios.
Sin embargo, dejó en claro su esperanza de regresar algún día para continuar compartiendo su mensaje espiritual con la comunidad local.
La misa alcanzó momentos de gran emoción, especialmente con el bautismo de Olivia, un hermoso acontecimiento que llenó de alegría a todos los presentes.
Los padres y padrinos de la pequeña Olivia recibieron la bendición del Padre Ariel, marcando así un momento significativo en la despedida.
Tras la ceremonia religiosa, se ofreció una cena comunitaria en el mismo predio, como muestra de agradecimiento por los servicios prestados por el Padre a la comunidad.
La cena se convirtió en un espacio de emotivos discursos, donde oradores expresaron su profundo agradecimiento hacia aquellos que, como el Padre Ariel, han dedicado sus vidas a sembrar valores y servir a Dios.
"La despedida del Padre Ariel Giménez en Cazadores Correntinos fue un evento cargado de emotividad, gratitud y esperanza, que marcó la profunda conexión entre el religioso y la comunidad a la que sirvió con dedicación y mucho amor. Su legado perdurará en los corazones de quienes tuvieron el privilegio de conocerlo y compartir su camino espiritual", sostuvo el Intendente José Irigoyen quien participó de la despedida junto al Comisionado Interventor Dante Romero.
CON INFORMACIÓN Y FOTOS DE FACEBOOK MUNICIPALIDAD C. CUATIA